Combatiendo el COVID-19 a través de biodescontaminación con Peróxido de Hidrógeno vaporizado

En enero de 2020, el comité de Emergencia de Regulaciones de Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud anunció el COVID-19 como pandemia.  Presentaciones clínicas de casos activos de COVID-19 desde casos asintomáticos a casos críticos. Las comunidades médicas y científicas siguen aprendiendo más cada día, pero por ahora se cree que el COVID-19 es transmitido a través del estornudo, la tos o a través del contacto de superficies contaminadas.

De acuerdo con la US CDC, la descontaminación para COVID-19 a través de los procedimientos estándar es apropiada. La Organización Mudial de la Salud, a través de su guía de bioseguridad para laboratorios, menciona los procedimientos de desinfección para COVID-19 y recomienda: “Los desinfectantes apropiados con actividad probada contra virus envueltos… (ej. Hipoclorito (cloro), alcohol, peróxido de hidrógeno, compuestos de amonio cuaternario y compuestos fenólicos).”

El trabajo recientemente realizado por Cleamix Oy en el centro de control de enfermedades de Corea ha validado esta situación, y La compañía realizó biodescontaminación por vapor de peróxido de hidrógeno a inicios de 2020 durante la pandemia de coronavirus. Las unidades de biodescontaminación de Cleamix son portátiles y altamente eficientes generadores de peróxido de hidrógeno. Los generadores usan los sensores de la serie HPP272 de Vaisala  para controlar la salida del vapor automáticamente durante el ciclo de biodescontaminación. Las sondas también proveen monitoreo de datos muy estable y precisa que permite a los operadores observar las condiciones del proceso en tiempo real.

Biodescontaminación de laboratorios con bioseguridad

Recientemente platicamos con el CEO de Cleamix Panu Wilska acerca de su colaboración con el Centro de Control de Enfermedades de Corea (KCDC por sus siglas en inglés) en el comienzo de la pandemia de coronavirus.

“El KCDC tiene laboratorios con bioseguridad nivel 2 y 3 con un volumen total de 2500m3,” dice Wilska. “Nuestro contrato con nuestro socio local BioAll incluyó ambos laboratorios. Los laboratorios eran aproximadamente del mismo tamaño con varios cuartos separados, corredores y aisladores. Para descontaminar los espacios utilizamos cuatro generadores de vapor portátiles Cleamix”

Los laboratorios de bioseguridad son utilizados para estudiar materiales contagiosos de manera segura; con medidas de protección para el personal y equipados para prevenir la contaminación. Los laboratorios con bioseguridad están diseñados y son operados en cumplimiento con las leyes, políticas, regulaciones y recomendaciones para agentes infecciosos. Esta investigación es necesaria para entender patógenos para poder producir vacunas y otros tratamientos.

Existen cuatro niveles de bioseguridad que definen el tipo de investigación que puede ser llevada a cabo ahí y las medidas de seguridad que deben ser empleadas. Estos niveles están basados en prácticas, procesos y sistemas que proveen protección contra los patógenos que están siendo investigados. Desde BSL-1 a BSL-4, las barreras protectoras y los procesos se incrementan. Bioseguridad nivel 1 cubre trabajo con microorganismos que representan una amenaza mínima. Bioseguridad nivel 2 investiga agentes con un riesgo moderado. Precauciones y protecciones adicionales son utilizados, con barreras adicionales en accesos y procedimientos. BSL-2 usan cabinas de seguridad y otros sistemas de contención.

Los laboratorios con bioseguridad nivel 3 manejan patógenos potencialmente mortales, están estrictamente controlados, deben estar registrados con agencias gubernamentales y tener estrictos procedimientos de biodescontaminación. Los laboratorios BSL-3 requieren diseños estructurales especializados incluyendo controles de ventilación y flujo de aire, doble puerta automático de bloqueo. Los laboratorios con bioseguridad nivel 4 abarcan investigación con patógenos de muy alto riesgo o cualquier agente con alto nivel de incertidumbre o letalidad. Estos laboratorios emplean las más estrictas regulaciones, restricciones, equipamiento y diseño.

Medición de concentración de H2O2 en línea: efectiva y eficiente

“Durante el proceso de biodescontaminación, la sonda HPP272 mostró que la concentración de H2O2 estaba incrementando rápidamente” dice Wilska. “El tiempo promedio del tratamiento por área segmentada fue de setenta y cinco minutos, más el tiempo de ventilación. La ventilación fue muy rápida pues pudimos encender el sistema de aire acondicionado después de cada tratamiento. El proceso fue validado por indicadores biológicos para matar a razón de 6-log.

En biodescontaminación 6-log se refiere al número relativo de microbios destruidos durante la desinfección. Un 1-log destruye el número total de microbios por un factor de 1,000,000. Una reducción 6-log es un objetivo común de la biodescontaminación, donde el objetivo de la esterilización es matar a todos los microorganismos, virus, y hongos. La biodescontaminación es usada debido a su relativamente segura operación para operarios, equipos y materiales.

Resumiendo el trabajo de Cleamix en el KCDC, Wilska dice:

“Nuestra biodescontaminación tomó dos días de trabajo; sin embargo, ahora que conocemos el área y el desempeño de descontaminación de dichas áreas, el mismo trabajo puede ser completado en un día. De acuerdo con KCDC, el procedimiento que habían contratado antes con un proveedor diferente tomó 4 días para ser completado. Después de siete días de incubación, los resultados de nuestra descontaminación fueron confirmados sin lugar a dudas – el proceso fue 100% exitoso.”